sábado, 16 de enero de 2010

Miedo

El frío recorre cada espacio en mi corazón,
se hiela cada resto de felicidad,
el momento va indicando
que la soledad se va apoderando de mi,
dejando mi alma sin respirar.

Pasan las horas y mi voz es fugaz,
mis pensamientos no son nada,
mis labios buscan el abrigo de un beso,
mientras mis sentidos se refugian en la oscuridad.

Mis manos tratan de ocultar mis ojos,
para evitar demostrar el sufrimiento que hay en mi interior,
para evitar cada palabra que dan a entender
cuando mi mirada se fija en alguien.

Un frágil sentir va tomando lugar en el espacio que ocupo,
queriendo traspasar las puertas de mi corazón,
el Miedo congelando mis fortalezas,
aniquilando mis deseos,
dejando mi mirada en una tormenta inacabable,
dejando mi cara en un retrato antiguo
sepultando mi último respiro de vida.